
Con ocho sesiones de formación intensiva, dirigentes vecinales y efectivos policiales fueron certificados en herramientas de mediación, resolución pacífica de conflictos y comunicación asertiva. La capacitación fue posible gracias a un convenio entre la Municipalidad de Temuco y la Universidad de La Frontera.
No todos los conflictos deben escalar. Algunos pueden resolverse con diálogo, empatía y preparación. Esa es la convicción que guía la más reciente iniciativa impulsada por la dirección de Seguridad Pública de la Municipalidad de Temuco, que acaba de certificar a 37 nuevos mediadores comunitarios, entre ellos dirigentes vecinales y Carabineros de la Oficina de Integración Comunitaria (OIC) de la Segunda Comisaría.
La capacitación, compuesta por ocho jornadas, culminó con una emotiva ceremonia, en la que los participantes recibieron sus certificados como agentes activos en la promoción de la convivencia vecinal.
La formación fue posible gracias a un convenio entre la municipalidad de Temuco, a través de su Oficina de Protección Ciudadana, y el Postítulo de Mediación Familiar y Comunitaria de la Universidad de La Frontera, encabezado por la Dra. Ximena Briceño junto a los docentes Mg. Varinia Penco y Mg. Javier Ochoa.
Durante el proceso, los participantes adquirieron herramientas clave para intervenir en conflictos cotidianos, como ruidos molestos, microbasurales, tenencia irresponsable de mascotas o diferencias entre vecinos por el uso de espacios comunes. Además, aprendieron sobre comunicación asertiva, técnicas de escucha activa y mediación comunitaria. Desde ahora, los nuevos mediadores son parte de la primera línea de detección, contención y resolución pacífica de conflictos en sus barrios, actuando como agentes de cambio y contribuyendo a un entorno más armónico y seguro para todas y todos.
Rodrigo Valdés, encargado del departamento de Programas, sostuvo que con esto la comuna da «un paso concreto hacia una convivencia más pacífica en Temuco. Gracias al trabajo conjunto con la Universidad de La Frontera, certificamos a 37 agentes de cambio: dirigentes vecinales y Carabineros de la Oficina de Integración Comunitaria. Ellos cuentan ahora con herramientas clave en mediación, comunicación asertiva y resolución de conflictos. Desde ya, son la primera línea para abordar de forma pacífica situaciones cotidianas como ruidos molestos o tenencia responsable de mascotas. Esto es seguridad desde el territorio, con y para la comunidad”, concluyó.