En los envases o cajas se deberá informar el origen del producto y el tratamiento que ha recibido Esta información se entregará a través de un código de lectura rápida, código QR u otro medio electrónico de lectura.
Fritos, cocidos o revueltos. Blancos, de color o pasteurizados. Cualquiera sea la forma, el huevo es uno de los alimentos preferidos en Chile: según estimaciones, se consumen 230 huevos por persona al año, cifra que deja al país como el quinto consumidor de Latinoamérica.
Hoy, además, es cada vez más común toparse en supermercados, tiendas gourmet o mercados orgánicos con nuevos tipos, como los denominados huevos de gallina “libre” o “feliz”: aquellos que son producidos en un ambiente mucho más parecido a la forma natural en que siempre se criaron las gallinas.
Sin embargo, uno de los problemas que enfrentan los consumidores en Chile frente a esta categoría de “huevos felices” es que no tienen cómo comprobar que el producto haya sido efectivamente elaborado bajo esos términos.
Eso, al menos, hasta ahora, porque hoy en la Comisión de Agricultura del Senado se aprobó en general el proyecto de ley sobre la trazabilidad y la certificación de huevos de gallina “feliz” o “libre”, que pasará a ser discutido en Sala.
El proyecto tiene como objetivo fortalecer el derecho a un consumo informado y la seguridad alimentaria de las personas, obligando a los productores a indicar el origen, tratamiento y calidad de los huevos de gallinas.
Para su autora, la senadora Carmen Gloria Aravena, su aprobación significa un avance importante, pues “muchas empresas están vendiendo huevos como de gallina ‘libre’ o ‘feliz’ cobrando un precio superior al de un huevo normal. Sin embargo, no hay ninguna garantía de que lo que se está ofreciendo como de gallina libre lo sea. En ese sentido, esta ley viene a solucionar un vacío, pues en los envases o cajas de huevos se deberá informar el origen del producto y el tratamiento que ha recibido, así como también la forma de crianza de la gallina, los medicamentos y tratamientos que esta ha recibido”.
Adicionalmente, este proyecto recién aprobado ocupa como modelo de la Ley 21.179 -cuya autoría también es de la senadora Aravena-, que establece normas sobre elaboración, denominación y etiquetado de productos lácteos o derivados de la leche. Así, los productores de huevos de gallinas “libres” o “felices” tendrán que informar al cliente a través de un sistema simple y moderno como el código QR sobre el tratamiento que ha recibido el producto alimenticio.